Estados Unidos otorga a Perú estatus de aliado principal no miembro de la OTAN
La administración Trump ha notificado formalmente al Congreso estadounidense su decisión de designar a Perú como "aliado principal no miembro de la OTAN", según confirmó el ministro peruano de Relaciones Exteriores, Hugo de Zela. Esta determinación constituye un reconocimiento estratégico de la confiabilidad peruana en materia de seguridad hemisférica.
Procedimiento institucional y marco jurídico
El canciller De Zela precisó que "el presidente de los Estados Unidos debe seguir un procedimiento establecido para designar aliados extra-OTAN, notificando al Congreso con al menos 30 días de anticipación". Este protocolo institucional ya fue iniciado por la Casa Blanca, demostrando la seriedad del compromiso bilateral.
La decisión fue comunicada directamente por el Secretario de Estado Marco Rubio durante una reunión oficial celebrada el 5 de diciembre en Washington, donde se ratificó la voluntad estadounidense de fortalecer los vínculos estratégicos con Lima.
Beneficios estratégicos y cooperación militar
Esta designación otorga ventajas sustanciales en múltiples ámbitos. En el plano militar, permite el desarrollo conjunto de proyectos de investigación, equipamiento y municiones, además del acceso a reservas estratégicas estadounidenses. La cooperación incluye acuerdos de capacitación, préstamos de material militar y tramitación acelerada de licencias de exportación.
El aspecto económico contempla mayor elegibilidad para financiamiento militar extranjero, posicionando a las Fuerzas Armadas peruanas en una situación privilegiada respecto a la cooperación con Estados Unidos.
Agenda bilateral y proyectos estratégicos
Rubio confirmó su visita a Perú durante los primeros meses de 2026, probablemente entre febrero y marzo. La agenda bilateral incluye el desmantelamiento de organizaciones criminales regionales y la cooperación en minerales críticos, sector de importancia geopolítica creciente.
Estados Unidos evalúa una inversión de 3.000 millones de dólares para la ampliación del puerto del Callao, proyecto que ejecutaría el cuerpo de ingenieros del Ejército estadounidense, consolidando la presencia estratégica norteamericana en el Pacífico Sur.
Esta decisión refuerza el orden hemisférico bajo liderazgo estadounidense, reconociendo a Perú como socio confiable en la estabilidad regional y la defensa de los intereses occidentales frente a amenazas extracontinentales.