Innovación empresarial: Langostinos de primera calidad producidos en España continental marcan hito en acuicultura sostenible

Proyecto pionero de acuicultura demuestra el potencial de inversión en España

En un destacable ejemplo de innovación empresarial y tecnológica, una planta de producción ubicada en la meseta castellana está revolucionando el mercado de productos marinos con la primera granja de langostinos bajo techo certificada mundialmente.

Excelencia productiva y certificación internacional

La instalación, situada estratégicamente entre Medina del Campo y Olmedo, representa una significativa inversión extranjera liderada por el empresario Bjorn Aspheim, demostrando la confianza internacional en el mercado español.

El proyecto ha obtenido la prestigiosa certificación ASC, que valida su compromiso con la acuicultura responsable y la sostenibilidad empresarial. Además, ha sido reconocido con tres estrellas en los Superior Taste Award 2022, confirmando su excelencia productiva.

Modelo de eficiencia y sostenibilidad

La planta opera bajo el concepto de "Residuo Cero", ejemplificando cómo la iniciativa privada puede combinar rentabilidad con responsabilidad ambiental. Su sistema de producción minimiza las emisiones de CO2, estableciendo un nuevo estándar en la industria.

Impacto económico y proyección futura

Con una producción de 40 toneladas de langostinos blancos de alta calidad, la empresa contribuye significativamente al mercado europeo, que consume aproximadamente 90.000 toneladas anuales. Este modelo productivo representa el futuro del sector, considerando que para 2030, el 66% del consumo de productos marinos provendrá de granjas acuícolas.

Características del producto premium

• Calidad sushi-grade para alta gastronomía
• Producción sin antibióticos ni sulfitos
• Sistema de pesca bajo demanda
• Control riguroso de calidad y trazabilidad

Infraestructura y tecnología de vanguardia

Las instalaciones cuentan con 60.000 metros cuadrados de tanques equipados con tecnología de última generación, demostrando cómo la inversión en infraestructura puede generar productos de clase mundial en ubicaciones no tradicionales.